Yudí Rodríguez: En Artemisa la esperanza se forja a través del esfuerzo diario
Los primeros rayos del sol asoman sobre el horizonte iluminando un paisaje que aún lleva las cicatrices de la tormenta. Después del paso del huracán Rafael, cada día en Artemisa se ha convertido en un testimonio de esfuerzo y resiliencia.
A estas labores se ha sumado la Miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y Jefa del Departamento de Atención a los Servicios, Yudí Rodríguez Hernández.
“Todas las mañanas se evalúa la situación de la recuperación eléctrica. Nos reunimos con la Presidenta del Consejo de Defensa, con el Comandante Ramiro Valdés, los compañeros de la Unión Eléctrica que están asesorando al trabajo de la provincia y otros miembros del Consejo de Defensa provincial y evaluamos concretamente el escenario municipio por municipio”, explicó la funcionaria.
“Lo primero que restablecimos aquí fue el tema de los hospitales, el abasto de agua y el servicio de energía eléctrica porque eran de las cuestiones más vitales para la población”.
Agregó que en la tarde-noche, se reúne el Consejo de Defensa Provincial, se evalúa el cumplimiento de cada una de las medidas dispuestas por este organismo y también el trabajo de los grupos del Consejo. Y ahí se valora lo realizado y en lo que se va a trabajar el próximo día, acotó.
Desde un inicio, a petición del Presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, se decidió crear grupos de trabajo para acompañar a las provincias más afectadas por el fenómeno meteorológico.
Yudí está con nosotros desde antes del evento, precisó la Primera Secretaria del Partido en Artemisa, Gladys Martínez Verdecia, al mismo tiempo que señaló que también la han acompañado el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, quien ha contribuido en la solución de importantes problemas, así como otros cuadros del Comité Central del Partido.
Recalcó que ha sido una compañera que ha cumplido con el rol que le corresponde desde el órgano de trabajo, por lo que hemos sentido su exigencia, pero, sobre todo, su activa presencia y explicación oportuna en cada uno de los lugares donde los artemiseños padecen los problemas y las afectaciones.
Las secuelas no se olvidan, pero toca levantarse
Un panorama aterrador dejaba Rafael. Las casas que una vez estuvieron llenas de vida, ahora mostraban ventanas rotas, techos hundidos y fachadas sin color. Los escombros y árboles caídos, contaban la historia de lo sucedido; la tristeza era palpable entre los que veían su mundo transformado en un paisaje desolador.
Damisela Domínguez Iturriaga hizo un alto en las labores del hogar para contarnos su vivencia. “El impacto de Rafael fue tremendo, la población se ha visto muy afectada. Agradezco los esfuerzos en este proceso de recuperación, porque aunque somos muchos los dañados, ha sido muy bueno, barrio por barrio con el trabajo unido y la comunicación entre todos los factores, tan necesario en tiempos como este”, señaló.
El niño Cristian Rodríguez, de Alquízar, uno de los municipios más afectados, relató: la ventana del cuarto de mi hermana se cayó, el techo del ‘paladar’ del barrio se rompió, volaron las tejas. Enseguida pensé que la recuperación se demoraba, pero entre todos hemos recogido basura y estamos trabajando para poner nuestra comunidad bonita, y ya este lugar parece otro.
En el Consejo Popular “El Guerrillero” conocimos historias inolvidables de sus pobladores, que constituyen lecciones de resistencia, valentía y solidaridad. Muchos fueron los daños en esta zona. Azayli Hernández bien conoce de ello y cuenta que “fue un momento aterrador; yo por los menos pasé la tarde más negra de mi vida”, dijo.
Con lágrimas en los ojos señaló su casa destrozada por los embates de la tormenta. “Me desbarató ver cómo todo se destruía y no poder hacer nada, porque lo primero es resguardar la vida. Es muy doloroso, pero me consuela que hemos recibido mucho apoyo”, expresó.
También contó que solo pensaba en proteger a su pequeña hija, la cual sostenía en brazos al momento de esta entrevista.
“Hasta ahora hemos percibido que la fase recuperativa ha avanzado, somos conscientes de que es mucho desastre y hay que ir paso a paso. Nos tomará tiempo, pero entre todos lograremos salir de esto. Tenemos la experiencia del Charly, no fue ni parecido a este, y nos recuperamos. Confiamos en la Revolución que nos ha dado mucho. Si nunca nos ha dejado abandonados, ahora menos", finalizó.
Gabriela Bravo Larrinaga, delegada de la circunscripción 37, también conversó con el equipo de PCC.CU.
Recuerda que previamente prepararon las condiciones antes del paso del evento y luego, de conjunto con el Consejo de Defensa Provincial y Municipal, evaluaron las afectaciones.
Aquí nos mostró la sub-estación eléctrica del municipio. Explicó Bravo Larrinaga que uno de los postes golpeó constantemente al transformador durante el paso de Rafael, se inclinó y cayó sobre la corona de este hasta romperla.
“Como medida se procedió a reciclar el aceite para ir quitando la humedad, pero al instalarlo las pruebas no fueron efectivas e hizo una explosión, lo que dejó sin fluido eléctrico- a buena parte de la comunidad", manifestó. Agregó que ya se buscan alternativas y se prevé el cambio del transformador para garantizar una mayor robustez en el servicio.
Al referirse a la participación popular, destacó que ha sido clave por estos días, desde las labores del hogar, el barrio y, por supuesto, con los que han venido de otras partes a apoyarnos dejando sus casas y familias.
Las calles, aún marcadas por los estragos, se llenan de actividad: hombres y mujeres se agrupan para limpiar escombros, reparar techos y reconstruir lo que el viento se llevó. En este sentido, Yaul Roche González, trabajador eléctrico de una brigada de apoyo de Villa Clara, detalló: “Primero estuvimos en Mayabeque, cuando nos trasladamos para acá el panorama era desolador. Nuestro compromiso es estar aquí y cumplir bien la tarea de restablecer en el menor tiempo posible el servicio".
Sobre la lejanía de su casa por contribuir con su experticia a estas labores, precisó que es parte de una tradición familiar de generaciones de linieros, siempre dispuestos a trabajar y ayudar. “Desde lejos siempre me apoyan y estoy seguro que sienten orgullo de que yo pueda estar donde el deber llama”, ratificó Roche González.
Para otros, vivir esta experiencia ha constituido un reto y una superación tanto en lo profesional, como en lo personal. Tal es el caso del joven liniero espirituano José Manuel Fife Díaz, quien ante el llamado no dudó en dar el paso al frente. “Me quedé asombrado con tanto desastre, es mi primera vez en misiones como estas. Aquí estoy dando todo de mí para devolver alegrías”, dijo.
“Asimismo, esto me permite adquirir nuevos conocimientos, tengo buenos maestros y lo que queda es trabajar. Cuenten conmigo ciento por ciento”, agregó.
En este esfuerzo colectivo, los artemiseños se han unido para apoyar a quienes laboran sin descanso. Con generosidad ofrecen lo que tienen y cada gesto es recibido con agradecimientos y aplausos que elevan los ánimos a continuar con mayor fuerza.
La recuperación es palpable, “fruto del apoyo de las provincias menos afectadas. Sin sus brigadas no hubiésemos podido lograr lo que hoy tenemos, sentenció Yudí Rodríguez.
A su vez, reconoció la Miembro del Secretariado que se ha ido trabajando con un nivel de agilidad, de inmediatez, con deseos de hacer rápido las cosas y restablecer en un tiempo más corto todas estas cuestiones que afectan directamente a la población y las actividades de la economía.
Con respecto a este tema, la Primera Secretaria del Partido también detalló que queda mucho por hacer. Aclaró que cuando uno habla de recuperación, no quiere decir que todo está resuelto, pues algunos de los damnificados pudieran pensar que no estamos claros de la complejidad de la situación.
“El pueblo artemiseño ha jugado un papel sumamente importante en esta etapa, y su disciplina antes, durante y después del paso del fenómeno meteorológico ha permitido que hayamos podido llegar hasta aquí, sin lamentar la pérdida de vidas humanas”, subrayó Martínez Verdecia.
Desde aquel día devastador, los habitantes han despertado con un propósito renovado, listos para enfrentar los desafíos. Con ellos continuará la Miembro del Secretariado del CCPCC, Yudí Rodríguez, quien aseguró que en Artemisa la esperanza se forja a través del esfuerzo diario, convirtiendo la adversidad en una oportunidad para renacer.
“En los artemiseños están el ánimo, la voluntad, los deseos de seguir restableciéndose del paso del huracán Rafael y llegar con otra imagen de normalidad, de recuperación, de belleza que devuelva el esplendor a la provincia y le permita ofrecer una mejor prestación de los servicios, especificó la dirigente partidista Yudí Rodríguez.
“Hay metas muy difíciles, pero yo creo que se pueden alcanzar. Es otro compromiso mayor salir de esta etapa, recuperarse y vencer todos los obstáculos", culminó.
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