
Cuba y la lucha contra el Alzheimer: Un compromiso colectivo
El Día Internacional de la Lucha contra el Alzheimer, que se conmemora este 21 de septiembre, es una fecha dedicada a aumentar la conciencia sobre esta enfermedad neurodegenerativa que afecta a millones de personas en todo el mundo.
El Alzheimer no solo impacta a quienes lo padecen, sino también a sus familias y cuidadores, generando un desafío emocional y social significativo.
En Cuba, la ciencia y la investigación han tomado un papel protagónico en la búsqueda de soluciones para esta enfermedad. Instituciones como el Centro de Neurociencias de Cuba y el Instituto de Medicina Tropical "Pedro Kourí" están a la vanguardia de estudios que buscan comprender mejor los mecanismos del Alzheimer y desarrollar tratamientos eficaces.

El Dr.C de la salud Roberto Rodríguez Labrada, director adjunto del Centro de Neurociencias de Cuba (Cneuro), destaca la gravedad del Alzheimer como la principal causa de demencia primaria, representando entre el 50% y el 60% de todos los casos de demencia.
Esta enfermedad tiene un impacto monumental en la calidad de vida de los pacientes, sus familias y la sociedad en general, siendo la principal causa de discapacidad en adultos mayores. "Ocho de cada diez ancianos que requieren cuidados permanentes padecen Alzheimer, generando una dependencia casi total", señaló Rodríguez Labrada.
A nivel global, el costo económico de las demencias supera al de enfermedades como las cardiovasculares y el cáncer, alcanzando un trillón de dólares anuales en atención, lo que representa aproximadamente el 1% del producto interno bruto mundial.

Los últimos estudios epidemiológicos en Cuba revelan que hay aproximadamente 160,000 personas con demencia, lo que representa el 1.4% de la población total y el 10.2% de las personas mayores de 65 años. La incidencia de nuevos casos es de 21 por cada 1,000 habitantes en este grupo etario, y se espera un aumento considerable en los próximos años debido al envejecimiento poblacional.
A pesar de los avances, el Alzheimer sigue siendo una "enfermedad huérfana" en cuanto a tratamientos efectivos, señaló Roberto Rodríguez. Aunque se han aprobado nuevos tratamientos como los anticuerpos monoclonales, su alto costo y los efectos adversos limitan su accesibilidad, especialmente en países en desarrollo, que son los más afectados.
Cuba ha implementado un programa gubernamental para abordar la dinámica demográfica relacionada con el envejecimiento y el aumento de la prevalencia del Alzheimer, dividiéndose en dos vertientes: una enfocada en la atención desde la salud pública, que incluye consultas especializadas y promoción de hábitos saludables; y otra centrada en la respuesta tecnológica y productiva para la atención de pacientes.
"En el ámbito de la investigación, BioCubaFarma está desarrollando varias neuromoléculas terapéuticas contra el Alzheimer, incluyendo la Neuroepo, que ya se aplica en ensayos clínicos. Otras moléculas, como Cneuro 201 y JM20, se encuentran en fase preclínica", expresó el Dr.C de la Salud mientras señalaba que, además, se están desarrollando técnicas de diagnóstico avanzadas utilizando neuroimágenes para detectar la enfermedad en sus etapas iniciales.
El Centro de Neurociencias también ha creado un software llamado Neurohair, que permite la detección comunitaria del deterioro cognitivo y ofrece herramientas para la rehabilitación cognitiva y el apoyo a cuidadores.

"En el Centro Nacional de Biopreparados (Biocen) también se están buscando e investigando suplementos nutricionales para mejorar la calidad de vida de estos pacientes. Otro de los centros es el de Inmunoensayo que en colaboración con Cneuro están trabajando en la identificación de marcadores genéticos que informen sobre el riesgo a padecer la enfermedad y que puedan ser utilizados como complemento al diagnóstico de la misma", añadió Rodríguez Labrada.
El Día Internacional de la Lucha contra el Alzheimer es una oportunidad para reflexionar sobre los avances en la ciencia, particularmente en Cuba, donde la investigación y la innovación continúan siendo pilares fundamentales en la lucha contra esta devastadora enfermedad.
La esperanza reside en que, a través del esfuerzo colectivo y el compromiso científico, se logren tratamientos que mejoren la calidad de vida de quienes padecen Alzheimer y de sus seres queridos, basándose en una combinación de atención integral, investigación innovadora y desarrollo de tecnologías que buscan mejorar la vida de los afectados y sus familias.
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